Las Añadas de España ha hecho la presentación de los vinos de la Bodega Numanthia, de la D.O. Toro, en una nueva sala de catas, en la misma tienda de la calle Játiva número 3, en Valencia 46002, Ésta ha sido realizada por el director de la bodega, el señor Manuel Louzada.

(pinchar sobre la foto) La Bodega, que es de reciente creación, 1998, ha conseguido reunir unos viñedos de pequeña extensión, pero de mucha antigüedad, ya que está compuesta en su mayoría de cepas prefiloxéricas, algunas de entre 120 y 140 años. A eso se añade que la puvliometría en la zona es escasa, con grandes diferencias térmicas entre la noche y el día, además de unos suelos pobres, donde las raíces de las cepas han de profundizar mucho para conseguir el agua necesaria para su sustento. Estas circunstancias adversas para el cultivo provocan que las cepas produzcan unos racimos con granos pequeños y de poco peso, lo que favorece la obtención de mostos con una alta extracción tánica y colorante (antocianos), que junto con un grado alcohólico alto debido a la alta concentración de azúcares en el grano de la uva, propiciado por el clima seco, hacen que el vino reúna unas características inmejorables para su guarda. La tradición en Toro buscaba la obtención de vinos recios, con mucho tanino y color, la Bodega Numanthia apuesta por unos vinos más elegantes sin necesidad de esas grandes maceraciones, que anteriormente duraban hasta varios meses. Está claro que ha conseguido su objetivo, con las pocas añadas que han puesto en el mercado ya han conseguido 100 puntos Parker con uno de sus vinos.

El Numanthia es el vino insignia de la Bodega, es el primero que se empezó a elaborar, con cepas que no dan más que 2.500 kg de uva por hectárea, en racimos que rondan los 200 gr. Es un vino que muestra la expresión de la tradición de Toro en toda su intensidad pero con elegancia.

Se macera durante ocho días y permanece en barrica nueva de roble francés durante dieciocho meses aproximadamente. Puede mantenerse en botella, en buenas condiciones, hasta los ocho o diez años

Es de un color rojo picota con alguna tonalidad azulada, con marcas evidentes de glicerina y capa alta. En nariz el vino se muestra balsámico, mineral y afrutado (frutos rojos y cereza), con tonos de ahumados, especiados  y de maderas nobles. En la boca es un vino redondo. Sedoso y carnoso. Intenso y fresco, con un paso de boca muy amable. Tiene muy buena persistencia, ya que las sensaciones que aporta a la boca se mantienen durante bastante tiempo.

El Termanthia se ha convertido en un vino mítico, ya que en sus primeras añadas ha conseguido la máxima puntuación de Robert Parker, personaje que con su publicación The Wine Advocate, marca tendencias en el mundo entero. Este vino se obtiene de cepas prefiloxéricas de una edad entre los 120-140 años. Con una producción que no supera los 1800 kg por hectárea. El despalillado de la uva se hace a mano, grano a grano y se pisa con los pies, con unas votas especiales para no dañar las semillas de la uva, ya que esto aportaría una tanicidad no deseada con sabor a leño verde.

Se la hace una maceración pre-fermentativa en frío durante 5 días. La maceración con los hollejos dura 24 días. Barrica nueva bordelesa de roble francés con 20-22 meses de envejecimiento en total. Durante el envejecimiento se utilizan dos veces barricas nuevas, así el paso por barrica nueva es doble y el vino lo resiste muy bien. Trasiegos cada 4 meses.

En la copa se aprecia un color guinda oscuro, con una capa muy alta y grandes lágrimas de glicerina. Los aromas predominantes son los balsámicos, tostados y frutas negras, con especiados y minerales. Es un vino que necesita más tiempo del que disponíamos para abrirse y mostrar todo su potencial. En la boca se muestra amable, peo con fuerza e intensidad. Le vendrán muy bien algunos años más de botella para mostrarse en toda su plenitud y un largo decantado en el momento de consumirlo. Son dos excelentes vinos de Toro, que lógicamente no salen baratos, pero valen lo que cuestan, 30 euros el Numanthia y casi 120 euros el Termanthia.