Tres son las cervezas más populares de la República Checa, la Pilsner Urquell, la más conocida en el exterior, la Staropramen, que gracias a Mercadona está introducida en toda España, aunque su calidad ha bajado muchos enteros y ya no goza del favor de los checos y la tercera, menos conocida aquí, pero ganando muchos adeptos gracias a su excelente calidad y a que ya se empieza a encontrar en bastantes comercios de por aquí, se trata de la Budějovický Budvar, también denominada Budweiser checa. Pero no tiene nada que ver con la Budweiser americana, son dos cervezas totalmente distintas y diferenciadas por un universo de sabores y aromas a favor de la checa.Es también una cerveza tipo pilsen, dentro de la categoría de las lager, las de fermentación baja, como las otras dos.
La Budějovický Budvar es una cerveza de color dorado intenso, muy cerca del color ámbar. Al servirla forma una espuma blanca que desaparece rápidamente, dejando la copa sin apenas rastro de ella. A la vista el carbónico tampoco parece importante, pero esto casi es más una virtud que un defecto. Las cervezas con mucho carbónico tienden a disimular tanto lo bueno como lo malo, casi más lo segundo.
Al olfato es intensa, lo primero que se aprecia es el aroma a la malta, cebada malteada de buena calidad, en segundo plano el lúpulo, que va ganando intensidad.
Cuando la cerveza ya está estabilizada en la copa empieza a percibirse un aroma a hierbas y después una olor dulce que podría catalogarse como almíbar o quizás miel, o incluso azúcar caramelizado, pero es de poca intensidad, sin aromas tostados
En la boca tiene una entrada dulce, por la malta, después predomina un intenso sabor amargo, fresco y agradable.
Tiene una persistencia larga en la boca, se siente su sabor durante bastante tiempo.
En el posgusto se vuelve a percibir la malta y la miel.
Es una cerveza equilibrada y sabrosa de mucha calidad. Siendo pilsen es muy diferente de las nacionales.
Se puede encontrar en la mayoría de las grandes superficies y grandes almacenes más populares.