La buena cocina, aunque se esconda, sale a la luz
Si no me hubieran hablado de este restaurante nunca habría estado aquí, y hubiera sido una lástima perdérmelo. Creo que con esto empieza a quedar claro mi nivel de satisfacción.
No es que esté difícil de llegar, para nada, hay una pequeña carretera de apenas quinientos metros, si llega, que conduce hasta él desde una vía comarcal. Está emplazado al lado de una ermita de su mismo nombre, y ya se sabe que éstas no suelen emplazarse en sitios carentes de atractivo. En la foto se puede apreciar el entorno que rodea al restaurante, con el mar al fondo. Con sus acantilados y todo.
El nivel de equipamiento del comedor es bueno, lo que se aprecia en las mesas. Copas Scholtz-Zwiesel.
La carta de vinos es muy completa, tanto en denominaciones como en precios, hay vinos que rondan los diez euros y los hay de hasta los mil (L’Ermita y Pingus), yo me decido por este Sierra Cantabria que tiene una relación de calidad respecto a su precio excelente. Fue un ideal compañero para los platos que tomamos.
Empezamos con un magano a la plancha sobre pisto. El magano es un calamar que se pesca en la bahía de Santander con anzuelos y que no supera los 15 cm. Es muy tierno y es una de las especialidades de la zona ¡Exquisito!
Fritura de rabo de toro con una salsa estilo barbacoa, elaborada en el restaurante, y puré de remolacha. Este plato me encantó. Crujiente por fuera y tierno y jugoso por dentro.
Flan de morcilla de Villada (Palencia) con velo de pimiento y bola de queso de Guriezo, de la zona oriental de Cantabria ¡Fantástica!
Pescado al horno, “Machote” se le llama por aquí, es un pescado de roca parecido al besugo. Acompañado de unas patatas cocinadas con mantequilla pasiega y salsa rui. Simplificando la salsa rui es una base de mahonesa con algo de ajo y pimentón.
Vieira a la plancha, con cebolleta cocida en sidra lebaniega, cus cus con remolacha y salsa holandesa. Las propias vieiras parecían de mantequilla ¡Exquisitas!
Una comida que solamente puedo calificar de excelente. Acompañada de un buen entorno y un estupendo servicio.
Para volver en cuanto haya oportunidad.
Restaurante EL REMEDIO. Ermita el Remedio s/n. Ruiloba. Cantabria. Tfn. 942 10 78 13