RIFF y los atrapaos en la buena mesa ¡Excelente combinación!
Una nueva reunión de este genial grupo de aficionados a la gastronomía fue la excusa perfecta para volver al RIFF. Como mi visita anterior es muy reciente, os recomiendo su lectura para una mejor comprensión de lo que es este restaurante y su chef. (ver aquí)
El ambiente, como se puede apreciar, era muy distendido. Uno de los comensales regaló este magnífico ejemplar de agáricus macrosporus a Bernd Knöller.
Un restaurante de este nivel no depende solamente de la cocina, necesita un equipo en la sala que esté a la altura requerida y en ese sentido hace un gran papel Paquita Pozo. Ambos forman un tandem sobresaliente. Le dijimos a Bernd que tenía las manos libres para prepararnos el menú que él quisiera, según el precio pactado, y este fue el resultado
El omnipresente snack que tanta aceptación tiene. El arroz crujiente con algas.
Los otros snacks: Crujiente de garbanzos con semillas de hinojo, palomitas especiadas con curry y salsa de frutos secos.
Pan de aceite de oliva, flor de sal y romero, horneado en el propio restaurante.
El aceite Lágrima de la Cooperativa de Viver.
El primero de los vinos que probamos fue este champagne Bollinguer, ¡magnífico!
Empiezan los aperitivos con la coca valenciana con sardina marinada, berenjena y mahonesa. Una delicia la suavidad de la sardina, con un ligerísimo toque de ahumado y vinagre.
El segundo vino fue este pinot gris, Trimbach reserva, un alsaciano afrutado y seco, muy interesante.
El segundo aperitivo se monta a la vista de los comensales.
Es un bocado de papada de cerdo ibérico, con crujiente de pan y especias con lima rallada por encima.
Bloody Mary de agua de tomate clarificada ¡Me encanta!
Jamón de cordero casero con mahonesa de almendras. Muy original y conseguido el jamón de cordero.
Calabacín con queso fresco y hierbas aromáticas. ¡Me pareció espectacular! Un bocado muy fresco y sabroso
Tosta de pan de aceite con mahonesa de anchoas y pera laminada.
Le llegó el turno a este Belondrade 2013. En su línea, a nadie se le van a descubrir ahora las bondades de este Rueda.
Tartar de bonito con yema de huevo ecológico criogenizado. Espectacular este plato. Muchos matices, texturas y sabores.
Anguila a la brasa, acompañada de una pequeña porción de flor eléctrica o de Sichuan. Muy buena la anguila.
Empezamos con los tintos, en concreto con este descubrimiento de la aldea de Ahillas (Chelva). Bodega Terra d’Art. Elaborado con seis variedades autóctonas y foráneas. Recomendable y agotado en bodega. Aún se puede encontrar en tiendas.
Arroz de remolacha y champiñón portobelo laminado, con aire de caldo de pollo. Espectacular, visualmente y gustativamente.
Cigalas con colinabo. Un atrevimiento la combinación de estos dos sabores. La cigala dulce y sutil y el colinabo con su toque amargo y potente. Me gustó.
En vinos seguimos con palabras mayores, Amayna 2012 shira (syrah) chileno en formato magnum. Un vino muy serio, profundo y gustoso.
Un detalle del nivel del servicio.
Cerdo ibérico ecológico con coliflor y salsa de ajo negro. La carne tiernísima, con una costra de semillas de cilantro y canela que le da un contrapunto crujiente ¡Espectacular para mi gusto!
“Rabia” otro señor vino, para finalizar los platos principales. Bodegas Cerrón (DO Jumilla) lo elabora con la variedad petit verdot, con crianza de catorce meses en barrica. Redondo y untuoso.
Albaricoque al horno con pepino, almendra salada y aceite de oliva. Nuevo juego de contraste de sabores. Atrevido y arriesgado, para paladares que le gusten las experiencias nuevas.
Para acompañar al postre “La Cosa” una especialidad de Alfredo Maestro. Un moscatel de alejandría con las levaduras vivas. Parecía más una sidra que un vino, por la alta acidez.
Con los cafés los petit fours
Esta ha sido la primera comida del grupo de “Atrapaos” en un restaurante con estrella Michelin y dos soles Repsol. Para mí ha resultado satisfactoria, teniendo en cuenta que hace poco que estuve comiendo aquí y algunos de los platos ya los conocía. Tengo que volver pronto, el menú peque seguro que bien vale una nueva visita.
RESTAURANTE RIFF. Calle Conde Altea 18 (46005 Valencia) Información y reservas: 96 333 53 53 / 671 87 59 75
Abierto de martes a sábado de 13.30 a 15.30 y de 20.30 a 23:00