NUEVA TEMPORADA, LA VUELTA DE UN GRAN COCINERO
Tomás Montán lleva algunos años trabajando a un nivel de maestro y sigue sin ser reconocido por sus paisanos. ¿Por qué para algunos resulta tan difícil darse a conocer? ¿Será que la sencillez y modestia de Tomás no son buenos elementos de marketing? Un genio es un genio y es el momento de que sea reconocido como tal. Su amor por lo que hace está fuera de toda duda, yo le he visto acariciar unos pescados que me estaba presentando antes de decidir como iban a ser elaborados.
En su local de La Cañada ha efectuado una revolución en su estilo, ha convertido su alta cocina en una más acorde con los tiempos de crisis que estamos viviendo. Es una prueba más de su gran versatilidad en este negocio. Ha sido capaz de aplicar su refinada técnica en los fogones a lo que el cliente medio está pidiendo en estos momentos, cocina en miniatura de calidad. Su carta de verano está basada en tapas, en las que se aprecia el oficio de un gran cocinero. Ha convertido el jardín del restaurante en una terraza, donde exclusivamente por las noches se puede disfrutar de unos platos bien realizados a unos precios muy competitivos.
Algunos de los platos que figuran en esta “informal” carta ya figuraban en la que habitualmente ofrecía a sus clientes, transformados en suculentas tapas a unos precios muy asequibles. Se pueden apreciar perfectamente los precios pulsando sobre la foto, antes de la salvaje subida del IVA.
Como primera muestra estas croquetas de pollo, de un sabor muy familiar, que recuerdan a las que nos hacían nuestra madres.
Un espléndido ceviche de corvina. Pescado fresco por encima de todo y buena materia prima.
Unos montaditos de bonito cebolla y guindilla que siempre se quedan cortos. Apetecen más.
Coca de verduras. Un clásico que siempre se había servido como aperitivo.
La carta de vinos está bien equilibrada. Este Finca la Colina de Bodegas Sanz es uno de los mejores verdejos que conozco. Un vino de Rueda de toda la vida, con una relación calidad precio impresionantes.
La cocina japonesa tiene poco secretos para Tomás. Este Sashimi de buey estaba espectacular.
El steak tartare lo pide todo el mundo, por algo será.
Otro de los vinos de la carta que nunca defraudan. Este syrah 2009 Pago de los Balagueses de Bodegas Vegalfaro de la DO Utiel Requena.
La tempura de verduras y sepia otra muestra más del dominio de Tomás en la cocina japonesa.
El restaurante abre habitualmente solo por las noches, por razones obvias, ya que el servicio de tapas se realiza en la terraza, pero si un grupo de al menos cuatro personas hace su reserva para mediodía, Tomás habilita el restaurante y si es posible hace interesantes propuestas fuera de carta. Éste fue el caso de este plato denominado "Llandeta de Dénia", que llevaba varios pescados (los que vi acariciar), gambitas y mejillones. Un plato que no olvidaré.
Restaurante Vaixell. Calle 30, número 34. La Cañada (Paterna-Valencia) Teléfono 961 322 634. Precio medio, sin bebida, 25-30 euros.