Tapas tradicionales rediseñadas
Hay lugares que tienen cierto encanto y entre ellos están las bodegas y tabernas con solera. Me parece un gran acierto lo que, afortunadamente, se está haciendo con la recuperación de estas antiguas tiendas de vinos y de tapas que, de no haber caído en manos con sensibilidad gastronómica hubieran sido pasto del olvido y el consiguiente derribo.
Por suerte, parece que esa vuelta a la vida de estos locales va de la mano de emprendedores con ideas acertadas y dotados de una buena disposición para hacer las cosas bien. Recuperando recetas locales de siempre y utilizando materias primas de calidad, así como preocupándose por ofrecer amplias selecciones de vinos y vermuts para tomar por copas. Sentarme junto a una de esas barras, para tomar una tapa y una copa de vino me transporta a otra dimensión y me reporta felicidad y bienestar.
En la Bodega Anyora tienes la posibilidad de tomar el aperitivo, comer, cenar y merendar también. Tardeo se llama ahora. Las propuestas tienen una base tradicional pero con un toque creativo que las hace más interesantes. Como el pincho moruno de presa ibérica, los boquerones fritos con sal de lima o el bimi frito con alioli de avellana. Además de las excelentes conservas provenientes de la Central de Latas del Mercado Central.
O bien esta ensaladilla con caballa y aceite picante, que también está muy buena.
El figatell tiene una presentación peculiar en Bodega Anyora, está embutido como una longaniza. Es diferente y gusta.
Para finalizar estas mollejas con ajos tiernos, limón a la sal y jugo de pollo a l'ast. Muy ricas.
La oferta de vino por copas es bastante representativa. Hay vinos para casi todos los gustos, como este bobal con una crianza de 4 meses en tinajas de barro.
Otra de las muchas opciones era este Casa Agrícola, el nuevo proyecto individual del enólogo Pepe Mendoza. Elaborado con las variedades Monastrell, Syrah y Alicante Bouchet. Un vino que hay que probar y seguro disfrutar.
Si prefieres un vino de aperitivo, tiene este Petit Vermut, elaborado en el pueblo de Alfafara, con hierbas autóctonas de la sierra de Mariola, tales como la salvia y el tomillo.
Ahí tenéis un buen sitio para tardear o para tomar un aperitivo en cualquier momento. Comer de tapa es una buena filosofía y un gran invento.