Un vino para recordar amistades
Este vino me trae unos recuerdos muy bonitos. Lo probé por primera vez gracias a la generosidad de mi amigo Paco Flores, Secretario del Club de Enófilos de Valencia. Una vez, allá por el año 1997, que fuimos a su casa un grupo de amantes del vino, "winelovers" hay que decir ahora, entre otras botellas sacó una de Cosme Palacio que cuando la probé me pareció un vino elegante y con una sutileza aromática que me enamoró. Yo llevaba poco tiempo catando vinos, he probado después vinos que me han gustado más, pero esté se me quedó en un rincón de la memoria para siempre y cuando lo vuelvo a beber invariablemente me viene el recuerdo de mi amigo y de los gratos recuerdos que pasamos alrededor de unas cuantas botellas de vino durante los más de diez años que permanecí en el Club.
Hay muchas otras botellas que me recuerdan a otros amigos de aquella época y con los que sigo manteniendo una magnifica amistad. Lluis, Anselmo, Ernesto, Alberto, Rafa, Joseba, Arturo y alguno más que me dejo sin pretenderlo, debido a mi mala memoria.
Gracias amigos por todos los buenos momentos pasados alrededor del vino.