Al mundo de la coctelería siempre se le ha atribuido un cierto elitismo, parece que pedir un cóctel en un bar es algo sofisticado, cuando no extravagante, eso si tienes la suerte de que el camarero sepa lo que estás pidiendo.

El que presentamos hoy tiene además el glamour de haber sido popularizado por Madonna en algunas de sus intervenciones en el cine allá por los años 90 y, además, lo han puesto en el candelero las protagonistas de la serie “Sexo en Nueva York”. Es uno de los cócteles fáciles de hacer, la única dificultad es encontrar un buen zumo de arándanos, uno de sus ingredientes principales y el que le da ese tono rosado tan característico.

Para elaborar una copa de este cóctel necesitamos 4 cl de vodka, 2 cl de cointreau o triple sec (en definitiva un licor de naranja), 4 cl de zumo de arándanos y el zumo de media lima. Se coloca todo en una coctelera con bastante hielo, es importante que sea abundante para conseguir un rápido enfriamiento con el mínimo aporte de agua. Se agita todo junto hasta que notemos en las manos que la coctelera está bastante fría.

Sólo nos queda servir en una copa de Martini y decorar con una rodaja de lima. Resulta un cóctel bastante suave, con un ligero punto de acidez, por los zumos. En su favor hay que añadir que el zumo de arándanos parece que es eficaz para prevenir las infecciones de orina, así que quien padezca de esto que se atiborre de cosmopolitan, ya tenéis una excusa.