Ir al Baret de Miquel es para mi como ir a un espectáculo de magia, sabes que vas a disfrutar, sorprenderte y ser feliz.
Me encanta ver como cada vez que voy tiene casi tantos platos preparados fuera de la carta como en la carta, muchos de ellos recientemente creados. Es la antítesis de aquellos restaurantes que siempre ofrecen lo mismo o los que tienen una carta de temporada y no la cambian hasta que el calendario se lo indica. Él, seguramente va al mercado y en función de lo que más le gusta prepara sus platos. Es un problema, porque me gustaría cada vez probar todos los platos nuevos, más aquellos que para mi son imprescindibles, pues de algunos estoy enamorado y no puedo dejar de tomarlos, como los figatells de sepia y la tarta de manzana, entre otros.
La sencillez del local y la amabilidad de toda la familia hacen que te encuentres muy a gusto. Este mes de agosto ha habido auténticos problemas para conseguir una mesa.
Estos son algunos de los platos que he probado este verano en El Baret de Miquel.
Un aperitivo para acompañar a la primera bebida. Las papas o patatas fritas con salsa de berberechos. Algo sencillo y bueno pero que a alguien se le tenía que ocurrir.
En esta ocasión las comí con un vermut casero de Bodegas Vidal. Muy recomendable.
El pan, de miga prieta, mantiene su calidad inalterable en todas las ocasiones.
El sashimi de caballa con alcachofas tiernas prácticamente crudas, igual que el pescado, es uno de los platos que me gusta repetir. Me parece un plato muy conseguido.
El figatell de sepia, como ya he dicho, no puede faltar, he llegado a encargarlo al hacer la reserva para no quedarme sin él. ¿Que más puedo decir?
El mullador es una fresca ensalada con una base de diferentes tomates, cebolla y algún encurtido. Nada que ver con el típico mullidor hecho al horno, similar al pisto.
Un escabeche de caballa con helado de pan, tomate y anchoa. Aunque he repetido el pescado de este plato, elegido por mí, no tiene nada que ver con el anterior del sashimi. El pescado más fresco imposible y el helado de pan tomate y anchoa espectacular.
Cous cous de pulpo de Dénia con pescado a la brasa. Chirivía, calabaza, algas y raïm de pastor, sobre una base de caldo de cordero. Este plato es el que más me impactó de los probados este verano. Es sabor en toda la amplitud de la palabra. Un plato marinero por excelencia al que le va increíblemente bien el caldo de cordero.
La tarta de manzana es un compendio de texturas y sabores. Una masa crujiente cubriendo un helado de vainilla con manzana cruda y en compota.
El vino de este verano Menganito, producido para “Uvas de Cuvée” en Nieva (Segovia). Un verdejo de la D. O. Rueda, fresco y aromático. La carta de vinos no es extensa pero siempre he encontrado vinos adecuados y a buenos precios.
Solamente me queda añadir que cuando salgo de “El Baret de Miquel” ya estoy pensando en cuando podré volver.
El Baret de Miquel. C/ Historiador Palau 1 (continuación calle Colón) Dénia. Teléfono 673 740 595. miquelruizcuiners@gmail.com