Aunque parezca un trabalenguas es el nombre de este vino. Majuelo significa viña, aunque también hay acepciones que dan a entender que se trata de una viña joven que ya da fruto. En cuanto a la segunda parte del nombre “El Chiviritero” es una parcela que se encuentra a 750 metros de altitud con el suelo típico de la zona de La Seca (Valladolid) de manto de canto rodado y capas de arcilla y caliza. Lo plantado allí son cepas con una edad media de 39 años cultivadas bajo preceptos biodinámicos para ayudar a mantener el equilibrio natural del ecosistema.

 En 2014, Isaac Cantalapiedra decide montar su propia bodega con su hijo Manuel como enólogo y elaborar vinos de uva Verdejo mostrando todo el potencial de una variedad muchas veces demasiado intervenida. Esta familia de viticultores elabora vinos de terruño en el corazón de Rueda pero fuera de la denominación de origen y de las modas, mostrando en sus vinos ese Verdejo auténtico que tanto gusta.

La pasión por la tierra y el cultivo ecológico ha llevado a los vinos de los Cantalapiedra a un nivel de expresividad poco común en la región; son vinos capaces de exceder el carácter habitual de la uva verdejo o el de la propia zona de cultivo, son vinos de familia, de parcela, de uva verdejo libre, de terruño vivo.

Tuve la oportunidad de probarlo en Le Bar de Vins, de la mano del sumiller Paco Senís. Le estoy muy agradecido por la recomendación.

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