¿Qué significa Méli-Mélo? Pues es una expresión francesa que se traduce por revoltijo, popurrí, mezcolanza. Y de eso parece que va la propuesta de Raquel Marcén, una mixtura de ideas procedentes de cualquier parte, de estilos y de técnicas, todo cabe aquí, siempre que cuente con el nivel esperado para un local que lleva cosechando éxitos año tras año en los concursos gastronómicos en los que participa.
En un ambiente desenfadado se reinterpretan platos de toda la vida para darles un aspecto divertido, se combinan (mezclan=Méli-Mélo)) imaginación, producto y técnica para conseguir tapas novedosas que conquistan día tras día a su clientela.
En la primera parte del local el que da a la entrada el Méli-Mélo es un bar de tapas, donde una barra repleta de ellas invita a quedarse allí. En la zona más interior es un restaurante donde se dispone de una oferta también desenfadada pero enfocada más a la degustación de platos de mayor calado, aunque existe la posibilidad de probar dos selecciones de tapas de concurso.
Nosotros optamos por esta fórmula y pedimos lo siguiente:
Carpaccio de tomate aliñado con pico de gallo y migas de atún. Como se podrá comprobar las raciones son abundantes. El tomate tenía verdadero sabor, lo que actualmente ya es un éxito, pero el atún estaba un poco subido de sal. Mezclado se pudo tomar.
Surtido de tapas Excellent. Selección de cinco tapas presentadas a concurso. Originales y exquisitas.
Aquí en detalle cada una.
Butifarra de setas con borraja y alioli de moscatel
Patata asada rellena de ternasco
Pan de Leciñena con champiñón y panceta de Guijuelo
Hamburguesa de rape y gambas con cebolla caramelizada
Cave-Ovum. Pasta brick, una yema de huevo en el interior, setas, queso y nata.
Por último tomamos
Salteado teriyaki de solomillo y langostinos con chips de tubérculos. Abundancia de nuevo, originalidad y mezcolanza de técnicas. Divertido.
Carajillo Méli-Mélo con bizcocho, café, helado, natillas y espuma de Baileys. Espectacular este postre, goloso y fresco.
Esta noche también nos decantamos por un vino de la zona, DO Calatayud. Alquez de Bodega Sommos_Alianza de Garapiteros. 2019. Garnacha de viñedos antiguos. Su nombre proviene de una antigua unidad de medida del vino equivalente a 12 cántaros o 120 litros. Color rojo picota, intenso. Aromas frutales, fruta roja madura y notas minerales. En boca resulta sabroso, carnoso y equilibrado. Buen compañero para la cena.
Sin duda estamos en un lugar cómodo, donde se come bien de forma relajada, con un servicio atento y próximo, con imaginación y frescura en las propuestas de la carta y posibilidades de probar tapas de concurso.