¿Qué diferencia hay entre un restaurante de playa y un chiringuito? Formalmente hay muchas diferencias, en cuanto a infraestructura principalmente, pero es de suponer que los restaurantes a la orilla del mar son la evolución natural del chiringuito. Lo digo esto porque a mí "cariñosamente" este me parece un chiringuito bien montado. Está en el paseo marítimo de la playa de Pedregalejo en Málaga. El lugar era un antiguo barrio de pescadores y ahora es una línea continua de restaurantes (chiringuitos), muchos de ellos con su típico puesto de espetos, como el de Miguelito el Cariñoso.

Vista la grata experiencia que tuvimos con el "tomate picao" en el Asador Iñaki quisimos volver a probar suerte. Éste también estaba bueno, además figuraba en carta como "con ajo" y ciertamente que cumple con lo anunciado. Pedimos media ración porque nuestra intención era probar cuantas más cosas mejor.

El boquerón frito a la andaluza es un plato irresistible. Media ración también, que como se puede observar es muy cumplida. El producto es todo de primera calidad y la relación con el precio muy buena.

No podíamos dejar pasar por alto una ración de gambas fritas con salsa tártara, ésta sí completa, nada de media. Se comen como pipas, ya que vienen peladas y sin cabeza, en un plis plas estaban liquidadas.

El pez platino, de agua dulce y de origen asiático, ha acabado conformando o convenciendo en algún caso a los consumidores, que saben que el ‘Aphia minuta’ (chanquete) está prohibido, tanto su pesca como su comercialización. Aunque no tiene el sabor de éste último es un sustituto aceptable cuando su fritura es buena. En este caso cumplió bien.

Acabamos con esta rosada a la plancha. Hay que decir algo sobre este pescado. Primero que resulta muy sabroso, tanto a la plancha como frito, que es un pescado blanco, que algunos lo confunden con el mero o el rape, por su textura. Se pesca en las costas de Namibia, Argentina o Chile, por lo que toda la que consumimos es ultracongelada, pero no hay problema sigue estando exquisita. Como ésta que nos comimos.

Para beber nos decantamos por este Godello de la DO Valdeorras. Últimamente me están gustando mucho los vinos hechos con esta variedad de uva. Está elaborado por Bodega A Coroa, una de las más antiguas de España (siglo XVIII). En nariz se aprecia una gran franqueza de aromas y notable intensidad. Sutilmente las notas especiadas se funden con aromas de hierbas blancas silvestres. Afloran notas de cítricos. En boca denota ser un vino fresco, con acidez menos marcada y ganando suavidad y untuosidad. Es un vino largo, con un ligero amargor, propio de los grandes godellos. Un vino que convence y mucho.

Solo me queda recalcar que la atención fue muy buena, el servicio eficiente. Los precios muy ajustados. Totalmente recomendable. Reservar se hace imprescindible.