Este restaurante lo llevan un equipo de jóvenes cocineros que realizan una excelente oferta de platos de tapeo, en la cual mezclan productos locales con sabores tradicionales de la cocina española, asiática e italiana. La carta no es muy amplia pero sí muy interesante con propuestas que apetecen bastante. Los vinos han sido escogidos con mucho detenimiento, buscando referencias poco comunes, asequibles y muy seductoras. Una excelente opción para comer bien y económico en Murcia. Al ir en grupo compartimos varias tapas de la carta.
Empezamos con este aperitivo oriental, elaborado con masa wonton (la venden en supermercados orientales) suele rellenarse de cerdo, marisco o pescado y se acompaña de alguna salsa picante o agridulce. Este Wan-Tun Bautista, que fue Premio a la mejor tapa de Murcia en 2016, está relleno de pato a la provenzal con salsa hoisin a los cítricos. Un espectáculo.
También pedimos unos buñuelos cremosos de bacalao, con emulsión de ajoblanco y espirulina. Tal y como venía en la carta. Pero no trajeron estos presuntamente elaborados con tinta de sepia o calamar y huevas de pescado. Aquí hubo algunas concesiones a la creatividad, o es que la espirulina les da ese color. No hubo quejas ya que estaban ricos.
El caballito es una tapa típica de Murcia, no tanto como la marinera, pero sí muy popular (Lo puedes ver en la entrada anterior "Venezuela"). Aquí le han dado una vuelta de tuerca, que se agradece, lo han convertido en el "Caballito diablo", con un crujiente rebozado de cereales picantones. Un bocado diferente al clásico y con un toque canalla.
Ensalada griega Nada Escrito. Aquí nos encontramos otra peculiaridad gastronómica murciana, al cogollo o lechuga aliñada le apodan "perdiz" (desconozco la razón), venía con pollo campero, queso parmesano, concassé de tomate, tzatziki, lima y kéfir. Muy refrescante y completa.
Empanadilla de babilla de Angus, con pasta de soja fermentada, acompañada de salsa de ají y guacamole de aguacate. Una vuelta al mundo en una empanadilla: El Angus es un vacuno de origen escocés, la soja fermentada oriental, el ají peruano y el guacamole mexicano. Todo junto estaba muy bueno.
Una original versión o reinterpretación de esta clásico plato de canelones de gallina. En lugar de bechamel se acompañan de curry verde. Genial.
Los postres muy ricos. La leche frita la hacen con una pasta brick, toffee a la mantequilla noisette y helado de turrón, muy bien de sabor y buen contraste de temperaturas.
Sablé de manzana. Salteada al licor de asiático, helado de queso mascarpone y yuzu. Exquisito.
La carta de vinos, aunque algo corta, resulta atractiva, con referencias interesantes y, en algunos casos, poco conocidas.
Uno de los elegidos fue este "Corriente de Telmo Rodríguez", es un vino tinto de la D.O.Ca. Rioja, elaborado por la Compañía de Vinos Telmo Rodríguez. Este vino es un coupage de las variedades Tempranillo, Garnacha y Graciano. Es una vuelta a los clásicos de la Rioja. Me gustó bastante.
El otro que tomamos fue "Valderiz De Chiripa" 2021. Es un vino tinto, producido por la Bodega Valderiz en la Denominación de Origen Ribera del Duero. Está elaborado a partir de un 95% de Tinta del País (Tempranillo) y un 5% de Albillo. Destaca por ser un vino con aromas muy potentes a fruta roja. Excelente vino.
Nos hemos encontrado con un buen lugar para cenar o comer a base de tapas muy creativas y de calidad. Tenlo en cuenta si vas a Murcia o si vives allí.