Sitios de tapas hay muchos, pero con esta calidad pocos
Que la tapa está de moda no lo vamos a descubrir ahora, y que además es algo muy nuestro tampoco. Es una de las mejores formas y más divertidas de comer. En lugar de un primero y un segundo, que mejor que tomar seis o siete pequeños bocados que nos permiten disfrutar de una gran variedad de sabores, texturas y elaboraciones diferentes. Pues ahí es donde Miguel y Chelo están haciendo su revolución personal, dándoles su toque especial a las tapas de toda la vida. Su secreto, además de la creatividad en la elaboración y presentación de las tapas, es la calidad del producto. Además todos los días tienen un plato de cuchara para el que no pueda prescindir de él.
El local es pequeño, pero el cariño con el que te reciben lo hace grande. Hay que reservar sí o sí.
Esta es una de esas genialidades de las que hablaba. El sencillo boquerón en vinagre, pero hecho al momento. Primera cuestión a reseñar, la calidad del pescado. Sale a la mesa desespinado y crudo. Delante del comensal se aderezan y se dejan macerar unos minutos a la vista del afortunado que los va a disfrutar.
El resultado es espectacular, en apenas diez minutos unos boquerones exquisitos. Productos de calidad y exquisita elaboración son infalibles.
Steak tartare. Volvemos a los mismos principios, una buena carne y una manipulación mínima y certera. Además, aunque en la foto no se aprecia bien, la ración es generosa.
Alcachofas ligeramente rebozadas y fritas. Creo que la foto es lo bastante elocuente. Solamente añadir que la textura y el sabor eran los adecuados. Hay que dejar que la materia prima se exprese, como hacían estos alcauciles (Cynara scolymus).
Tosta de pan de cristal recién horneado con solomillo y foie. Ya no voy a volver a insistir sobre la calidad de los ingredientes. Solamente que le pidáis a Chelo o Miguel que os indiquen la mejor manera de disfrutarlo. Hay que doblar el pan y morderlo como si fuera un bocadillo. Toda una experiencia.
Tuvo mala suerte el codillo al horno. Estaba bueno, pero comerlo después de todos los bocados anteriores lo tenía difícil.
De postre un tiramisú de carajillo de ron bien elaborado.
No hay carta de vinos, hay unas listas en unas pizarras de las paredes donde figuran unos pocos vinos. En cuanto a cervezas tienen dos artesanales, Borinot y Marieta, además de la verde.
Lugar más que recomendable para disfrutar de una buena comida o cena a base de tapas.