La cocina tradicional puesta al día a 45 minutos de Valencia

Nuevo repaso a las elaboraciones de este novísimo restaurante afincado en la comarca valenciana de Los Serranos. Cocina de bases contundentes pero aligerada por la magnífica técnica del chef, que no deja indiferente a casi nadie. Cada una de sus elaboraciones te provoca una exclamación de sorpresa, al encontrar en ellas el sabor auténtico de los ingredientes, sin trampa ni cartón.

Ya en anteriores ocasiones he resaltado la magia y belleza del entorno y del local. Me sigue cautivando. Manteles impolutos y mesas y sillas, así como la cristalería y la vajilla impecables, cómodas y modernas.

Sin más preámbulos vamos a entrar en materia. Quien tenga interés por saber de las anteriores visitas puede mirar aquí y aquí.

El pan, que era una asignatura pendiente, por lo visto en los alrededores no hay una tahona que elabore buen producto, parece que empieza a encontrar su sitio en esta mesa. Fresado, de miga compacta y corteza sabrosa. Aunque puede mejorar algo todavía.

Empezamos con un lomo de bonito, en su punto, con un arroz picante de acelgas y berenjena a la llama ¡Impresionante! La guindilla le va fenomenal al arroz.

Una ensalada a su manera. Ajoarriero de coliflor, cebolleta a la llama, rábanos, y salmón marinado en sal y cilantro. Parece algo sencillo, pero es un compendio de sabores que no te deja indiferente.

Guiso de lenteja pardina de Guipuzcoa cocidas al dente, con verduritas, sepia sucia, dados de tomate concassé, lima y cilantro. Un plato de mesas humildes elevado a otra categoría.

Chipirón de playa con el fondo elaborado de sus tripas y un encebollado, acompañado de un blanquet elaborado en Chulilla. El cuerpo del calamar asado al soplete, lo que le da un sabor ahumado y las patas fritas a la andaluza. Acompañado de un aire de pepino. Me resulta casi imposible describir todos los matices de este plato, sin duda, para mi, el mejor de toda la comida.

Alcachofas de cosecha propia, recogidas la misma mañana. En tres texturas, crema, guisadas y fritas. A cual de las tres presentaciones esta mejor. No se puede prescindir de ninguna de las tres.

Bacalao desalado con tomate frito, también de cosecha propia. Tomate en conserva como se ha hecho toda la vida y después frito durante horas. Volvemos a sentir los sabores caseros de la infancia.

Olla chulillana. De todo, lleva de todo!!!

Interpretación de una pizza mediterránea. La masa ha sido sustituida por un chip de yuca y el resto de ingredientes, tomate, sardina, etc, con una elaboración y presentación inusual ¡Una genialidad! Y un trabajo exhaustivo para la elaboración de la crema de tomates y verduras, según se nos explicó.

Emparedado de membrillo de elaboración casera con queso de Cabrales, acompañado de frutos rojos.

Para acompañar la comida al principio un godello de Dominio de Tarés. Blanco fermentado en barrica de la DO Bierzo.

Después un tinto muy logrado, un rioja con una gran complejidad. Heras Cordon, un vino a tener en cuenta.

Salí del restaurante con ganas de volver.

Restaurante 9C+. Maestro Amblar 25. Chulilla 46167. Teléfono 628883973.