Vamos juntos, restaurantes y clientes
Como es bien sabido, en la Comunidad Valenciana, la hostelería ha tenido que cerrar por orden de las autoridades, esperemos que sea una última medida definitiva para vencer esta ola de contagios, siempre que colaboremos todos siguiendo al pie de la letra las indicaciones que se nos han dado, porque si no es así resultará demasiado gravosa para los restaurantes y bares, lo cual ya es totalmente injusto, aún obteniendo éxito contra la pandemia, en caso contrario habrá sido un sacrificio inútil que habrá pagado otra vez un sector de la economía ya muy castigado.
Por esa razón se ha reactivado el modelo de “comida para llevar”. Una alternativa para que los negocios de este sector no acaben totalmente asfixiados. Pero para eso necesitan de nuestra colaboración.
Uno de los que han iniciado la atención a sus clientes desde esta alternativa ha sido El Baret de MIquel en Dénia. Su propuesta es ofrecer un menú distinto diariamente por un precio de 25 euros. Como es habitual en este establecimiento, la acogida ha sido espectacular, como lo es el menú que ofrece. Ya las reservas se han de hacer con varios días de antelación. No os descuideis.
Este es el contenido de las cajas en las que se entrega la propuesta de cada día. Como se puede apreciar va muy bien presentada y es un menú bastante amplio para dos personas. La calidad es la habitual del Baret, sin menoscabo por la forma de empaquetado. Todo va en un recipiente adecuado para la preparación correcta en casa.
De arriba a abajo y de izquierda a derecha vemos, en primer lugar los buñuelos de bacalao, a continuación el "bullit valencià", el costillar de cerdo con crema de setas, abajo a la izquierda el puré de patatas al aceite de oliva, la coca de almorzar con bonito y encurtidos, y de postre la coca de almendra y limón. Falta en la foto el turrón de hígado de pato con pan de cacao, que no ha salido porque tapaba otros platos, y tampoco la berenjena a la llama, que se sustituyó por el "bullit valencià".
Como he dicho más arriba, la calidad de esta modalidad del Baret de Miquel no se ha resentido mucho. Qué duda cabe que es mejor disfrutar de sus platos recién salidos de su cocina, pero hay que adaptarse y seguir disfrutando de la vida, aún en estas condiciones.
¡Ánimo a todos!